Cooperadores

Desde los inicios de la Congregación, los Fundadores pensaron en las Auxiliares de las Obreras del Corazón de Jesús: mujeres que sin consagrase como religiosas colaboraran con ellas tanto apoyándolas en sus actividades como ayudándolas con sus recursos o bienes. En los comienzos el intento funcionó durante unos años pero posteriormente se fue diluyendo hasta desaparecer. Pero a partir de 2005 la iniciativa vuelve a resurgir hasta que poco a poco se fue concretando en lo que hoy conocemos como Cooperadores de las Obreras del Corazón de Jesús: un amplio grupo de hombres y mujeres que, esparcidos por el mundo participan de nuestro carisma y misión como laicos en la Iglesia. Estas personas nos apoyan en nuestras tareas apostólicas, nos acompañan en nuestras visitas y actividades de evangelización en los lugares apartados, hacen que nuestras fuerzas y posibilidades se multipliquen, pero sobre todo han ido interiorizándose de una espiritualidad, un estilo de vida que caracteriza a nuestro carisma: El Corazón de Jesús en el centro de la vida, compromiso en darle a conocer entre los más sencillos y desfavorecidos de lugares donde otros agentes de pastoral no llegan.

Actualmente los Cooperadores tienen un recorrido hecho que les hace sentirse familia, con vínculos y compromisos comunes. Realizan sus reuniones de formación mensualmente y una vez cada dos años realizan su asamblea internacional.